Risas

Y si la rosa ...en vez de roja...fuera un girasol?

Ja, se rió el payaso
Jeje me reiré yo.
Porque siempre rio de último.
y por eso, siempre rio mejor.

Amor-es....

El viernes conseguí a alguien.
No nos pongamos nombre dijimos.
Es más bello así, con la espontaneidad de lo que se desconoce.
Sí, hubo besos y más besos en el césped
cual película de romance inesperado,
de final feliz (y comienzo increíble).
Yo dizque pensando cómo había llegado allí...
sabiendo desde siempre que era lo único que habiamos querido los dos.
No pienso en lo que viene.
No me interesa el mañana intrigante
ni el pasado acusador.

Dame este hoy, este singular momento.
El beso del minuto corriente, que el que pasó ya es viejo
y el que vendrá aún no me lo has dado.
Así, cuando me hables sabré que estás conmigo.
Sólo eso....que estás conmigo.

Y no me importa

Hoy la vida estuvo más loca que siempre.
Doce juegos perdidos en la niebla y no me importa.
Wasting love in a desperate caress....y no me importa si te beso la boca.
Veinte mil leguas alrededor del mundo y no me importa si te tocó la rosa.
Cuando la cosa se pone así de demente,
me mueve el pensar que el mundo no es tan simple como parece.
No hay razones para no caer en la tentación.
No hay lluvia que no caiga al final de una tarde gris.
y pues el globo sigue girando...
...el fuego sigue quemando...
...y a mi no me importa...si ya te volviste loca.

NOCHES COMO ESTA..

En noches como esta
De fría estampa y estrellas locas
Presiento la vida
Como viniendo desde atrás
Asustando a los niños
Despertando a los locos.
No me asusta la entrada
Si sé por dónde salir
Las luces de la ciudad nocturna
Colman la pasión de los amantes
Que se ven
Que se aman
Que no se tocan
A las doce de la noche
Cuando el mundo duerme
Mi mente despierta
A escribir versos de mesa de noche.

Tienes miedo?

Què es el miedo?
Miedo es eso que sientes en el estòmago,
como orugas volvièndose mariposas.
El miedo vive allì,
donde la luz no alcanza
y el fuego no calienta.
Donde las rosas se marchitan
y los niños lloran.
Es donde vive el Coco.
Miedo es cuando ves sombras
sin cuerpo,
cuando no hay viento
pero los sauces lloran,
cuando los muertos viven otra vez
pero ya no en el recuerdo.
Cuando el mundo se vuelve incierto
y no es màs real ese beso
que mil fantasmas sin dueño.
El miedo te golpea en la cara.
Es frìo.
Es duro.
Pero tambièn inseguro.
No hay miedo alguno
que resista un amanecer.

El Loco

Pobre del loco que se cayò en la calle y nadie lo vio. Su fuerza descomunal impidiò que lo atropellara un carro: su fortaleza de loco lo salvò. Y claro, tenìa que haber sido asì. Por que como es un loco, cuando se cayò, se imaginò que nadie lo veìa para evitar la verguenza. Cuando el carro se acercaba, se imaginò a sì mismo como un superman todopoderoso y parò el carro con el dedo ìndice. Estaba tan, pero tan loco, que lo que la gente vio fue a un tipo trastabillando en la calle mientras un carro se salìa de la vìa y se estrellaba contra un poste.

Si las razones se acabaran
Si el mundo entero se perdiera de repente
Si las flores amarillas se volvieran grises
Aún estaría la Vida.

A veces se me ocurren frases, aforismos que nacen del aburrimiento o de un estado febril de creatividad aunque a veces se corresponden entre sí estos dos estados de ánimo. (No quiero pecar de vanidad: no es genialidad, es un deseo irrefrenable de poner en palabras un sentimiento). Los iré dejando aquí en el Blog de las Cosas que oíste mientras comprabas el café, regados por ahí como nacieron y como quedaron registrados en el papel.

Las rosas todavía eran rojas
y el río aún llevaba piedras...

Ayer.

Ayer pensé que la vida se comería a la muerte.
Doce rosas sobre la mesa.
El periódico abierto.
El petróleo a 100.
Por fin se fue Castro pero nos dejó a Huguito. Que porquería de herencia.
Huevos fritos y mantel manchado.
Pensé que el mundo ya no gira como antes.
El fogón encendido.
Veinte libros abiertos.
Mi mamá llamando a comer y un loco dispara en clase.
Lo que hay que ver.
Ya las rosas se empezaron a marchitar y la mancha no quita con jabón.

YO

Si, ese soy yo. El anti-hombre, el perdido que nunca ha sido encontrado. El que no vio, el anti-testigo, el que estuvo ahí nunca estando presente; el que toma agua para escupir fuego y llama a las tempestades en primavera.

Sí, es verdad. Nunca me importó esconderme del miedo para hacerle frente luego, cuando me atacaba la cobardía. Las rosas siempre fueron rojas pero yo las teñía de blanco perla y les ponía más espinas.

Sí, lo tengo que decir. Las palabras las dije antes de pensarlas, las buenas noticias se me perdieron por el camino y los pies me dolían si dejaba de caminar. Soy el que viendo venir la noche maldice al día porque no la deja pasar. Mis manos son de herrero y aún con ellas escribo los versos más hermosos esta noche como el chileno aquel.

Sí, no me importa. No me duelen mis alter-egos, no me molestan mis raras fisonomías o los bellos defectos. Soy el Antinomio, el Tautólogo más acertado y el hielo más caliente. La vuelta más larga, la historia mal contada, el Lázaro que se quedo muerto para siempre jamás.

Sí, así es mi vida. Mi mundo es tan corrupto que todo es bueno, las palomas se cansaron del vuelo y mi boca se moja de tanto hablar. Los colmillos del perro se hincaron en mí y ahora soy el lobo con temor a la Luna, el único que le aúlla al Sol y cuida a los conejos.

Sí, la cosa es esa. La muerte huye de mi presencia, trastabillando porque la puedo apuñalar por la espalda. Soy el máximo más pequeño, mi filosofía es la perfección de lo efímero, la eternidad de lo contrahecho. Mi vida es una perfecta imitación de la mejor de las vidas, tan perfecta que ya no es mía y entonces tendré que inventar nuevos mundos de pasiones calientes y colores fríos.

Es como digo. La moda me incomoda, las lágrimas me conmueven hasta hacerme reír y la crueldad me hace lamentarme hasta no querer poner atención.

Ahora es momento, me tendré que ir yendo, disolviéndome en los párrafos como mirando de lejos, como quien está sin estarlo, como quien no quiere la cosa, como quien es quien es sin serlo, como ese que, al final, siempre terminaré siendo yo, tú, él o ellos.